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En época de Navidad, con tantas preparaciones deliciosas en casa, es común que un peludo curioso termine comiendo algo que no debía. Y aunque para nosotros algunos alimentos parezcan inofensivos, para los perros pueden causar intoxicaciones serias. Aquí te contamos cómo identificar una intoxicación alimentaria en tu ringo, qué hacer y cómo prevenir estos accidentes desde la tenencia responsable.
Durante las celebraciones es normal que haya más comida al alcance de los perros: mesas servidas, platos en el suelo, visitas que comparten comida sin saber que puede hacerles daño o restos que caen sin querer.A eso se suma que muchas recetas navideñas contienen ingredientes tóxicos para ellos, como cebolla, uvas pasas, chocolate, exceso de grasa o condimentos.
Como perrunos responsables, debemos estar atentos para evitar que coman alimentos que puedan causarles daño y saber cómo actuar si sucede.
Las intoxicaciones pueden aparecer minutos u horas después de que el perro comió algo indebido. Algunas señales que debes vigilar:
Si aparece más de uno de estos síntomas, llévalo al veterinario lo antes posible. Los perros rescatados o que tienen antecedentes digestivos pueden reaccionar aún más fuerte a ciertos alimentos.
Antes de actuar, identifica:
Cualquier dato será útil para el veterinario.
Muchas personas buscan qué dar para que el perro vomite, pero no es seguro hacerlo sin supervisión veterinaria. Hay alimentos que, si se devuelven, pueden causar aún más daño.
Aunque existen recomendaciones populares, como leche, limón o aceite, ninguna es segura y pueden empeorar la intoxicación. Los tratamientos caseros no sustituyen el manejo profesional.
La hidratación es clave, sobre todo si está vomitando o con diarrea. Pero no lo obligues a beber.
Un profesional puede:
Ante la duda, siempre es mejor consultar.
Superficie alta, envases cerrados y basura asegurada.
Muchos dan comida “por cariño”, sin saber el daño que puede causar.
Un peludo satisfecho es menos propenso a buscar comida.
Si está inquieto cerca de la mesa o cocina, mantenlo ocupado con juguetes.
En celebraciones, cada minuto cuenta.
Un perro empieza a mejorar cuando:
Si aún así persisten síntomas como diarrea prolongada, debilidad o temblores, consulta nuevamente.
Las intoxicaciones alimentarias pueden prevenirse con información, precaución y mucha tenencia responsable. En estas fechas, acompaña a tu peludo, protégelo y mantén a raya los alimentos que podrían hacerle daño.
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